jueves, 11 de febrero de 2010

¿Por qué, a veces,decidirse cuesta tanto?

El algún momento haré el debido reconto de unas vacaciones que amé, amo y no voy a olvidar fácilmente; pero ahora sentia la necesidad impetuosa de desacargar por un instante lo que me pasaba.
Incertidumbre, duda y elección.
No sé que hacer, son sentimientos encontrados e infundados-sentimientos que sin dudas desearía no sentir- pero de alguna forma no puedo ir en contra de ellos. No puedo ir en contra de mi misma.
Es una terrible pelotudez, lo sé y lo digo de forma clara y valiente pero no me atrevo a enfrentarlo. Pocas veces me pasó algo así, quizás estoy más susceptible o más insegura. Más supercsticiosa y más idiota, eso seguro.
Ahora qué? me voy o no? Por qué este mal presagio me hace dudar tanto en una decisión que en otro momento la tomaría como normal,cotidiana, efímera y para nada relevante? No lo sé. No se nada.
Decido, me arriesgo- espero disfrutar de esa elección, espero que todo aquello que pasó en mi cabeza estos días no haya sido más que una ilusión de mis inseguridades innatas frente a un tema de tal sencillez- si no es así, que Dios me ayude.
Mis miedos e inquietudes quedan acá, estas letras se vuelan con el rugir del viento a orillas del mar.

El que está acostumbrado a viajar, sabe que siempre es necesario partir algún día.
Yo no viajo para ir a alguna parte, sino por ir. Por el hecho de viajar. La cuestión es moverse- ( Stevenson)-el abandono del aplastamiento me hace decidir así.

2 comentarios:

  1. No dejes que ningún tipo de inseguridad te haga dudar entre ir o no ir. No vale la pena, vas a viajar con tus amigas tres días lejos de todo, allá, en el mar, vos, el mar, el cielo, tus amigas, todo uno, todo fusión. Nada más tiene que importarte.
    Va a salir todo bien.
    Te quiero,

    ResponderEliminar
  2. Lo sé, o creo saberlo jaja,pero mmm bldeces mias. no me hagas caso pulchi,te adoro y gracias por todo-siempre♥
    Quiero verteeee blda, pronto.

    ResponderEliminar